Demasiado viejo para morir joven

Yo no escogí ser como soy, pero si elegí seguir siendo lo mismo.

Cuanto más te recuerdo más quiero olvidarte, no me haces falta pero te necesito.

Tal vez sea la hora de parar el tren y bajarme, aunque sea en marcha. No me gusta la gente que me mira, que me habla, que pasa cerca de mi. No me gustan los conocidos, prefiero gente extraña. Hola y adiós.

A veces pienso que no se pensar porque nada de lo que pienso me sale bien, ni tu siquiera.

Es hora de parar mi sombra, de esconderla, de ver las cosas pasar sin que me pasen las cosas. No me apetece, así no, deberías saberlo, debería saberlo.

Yo no escogí ser como soy pero si elegí seguir siendo lo mismo, y ya no se cambiar, no puedo cambiar.

Parada obligatoria. Demasiado viejo para morir joven.

Nos vemos en 2016.

3 comentarios sobre “Demasiado viejo para morir joven

  1. Nadie muere tarde, pero muchos viven tarde.
    Andan pensando… cuando tenga tal cosa, cuando tenga tal dinero, cuando tal chica me haga caso, cuando termine mi tercer doctorado (o mi curso elemental de sumas y restas)… viviré…

    Y no, se vive hoy, ahora, y con lo que se tiene. Si uno se da cuenta tarde de ello… vivirá demasiado tarde. . .

    Aunque éso de cambiar… uno dice que no cambia, y lo único que es constante es el cambio.
    Uno dice que no puede cambiar… y cada día se levanta distinto.

    Pero pretender que hoy me levante poeta, y mañana cobrador… no es posible.
    A disfrutar el cambio, y a disfrutar lo anquilosado… que es parte del vivir hoy.

    Cambia lo que tengas que cambiar, aférrate a lo que pretendas mantener fijo.
    Pero vive sin tardanza, vive hoy, y vive bien… que ya de la muerte, habrá juventud que se encarge de nuestros restos…

    Un trozo de delirio.. o melancolía este viernes.

    Ricardo M.A.

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